El 2013 trae reformas en la normativa del juego Online.

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La Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) estudia legalizar en el primer trimestre de 2013 las máquinas tragaperras online y las apuestas cruzadas, una modalidad que permite apostar sobre los resultados de las competiciones deportivas contra otros apostantes, actuando el operador de Apuestas deportivas como un mero intermediario.

En la actualidad y según han reconocido fuentes del Ministerio de Hacienda se ha iniciado un procedimiento de consultas con los operadores, en el que se anuncia la preparación de una reglamentación para la publicidad del juego online, con importantes sanciones para los casos de incumplimientos, lo que supondrá el final del sistema actual de autorregulación de los operadores de juego.

Dichos cambios incluirán modificaciones reglamentarias en cinco tipos de apuestas y en el bingo (pasando a suprimir las tres categorías existentes actualmente y redefiniendo el juego para ampliar sus posibilidades), como también cambia la normativa de las apuestas con el fin de liberalizar los acontecimientos y competiciones sobre los que apostar, suprimiéndose los catálogos tanto hípicos como deportivos.

En lo referente al bingo, la modificación de la normativa estan dirigidas a flexibilizar las modalidades del juego.

Para este año 2013, la DGOJ prevé que el sector crecerá un 10%, lo que supondrá que se superen los 5.000 millones de euros de facturación, lo que supone una recaudación fiscal de unos 150-160 millones de euros.

Según los últimos estudios en la actualidad cada jugador gasta una media entre 500 y 600 euros al año, lo que supone que en el pasado año se gastaran 952 millones de euros en póquer, 371 en los casinos, 861 millones en apuestas deportivas y 24 millones en el bingo.

Para regular este mercado creciente se ha diseñado este organismo, con la intención de garantizar una apertura segura del mercado especialmente destinada a proteger las personas con ludiopatías y otras vulnerabilidades y a los menores. También, con ello, se ha buscado la mejora de la seguridad jurídica tanto para los operadores como para los jugadores, al tiempo que se ha establecido un marco tributario sobre estas actividades.

Modificaciones que esperemos mejoren la experiencia de juego del usuario.